Dickey Betts en Barcelona

Miércoles de una semana cualquiera, día 18 de julio de 2012. Sale el jefe con la sala a medio gas, una cola absurda en la puerta y muchas ganas de pasarlo bien.
Al principio los solos flaquean algo, parece que se requiere más precalentamiento con el paso de los años.
Sale Santiago Campillo, en su línea de dedicarse a hacer buen rock, y el jefe se pica. En adelante el concierto fue a más.
Hizo dos sets de una hora, con una pausa en medio, y, por supuesto no se olvidó ni de Blue Sky ni de Rambling Man. Tras varios intentos el hijo consiguió sacarle una sonrisa al padre tras un gran solo de guitarra. Los solos del jefe empezaron en tristes pero a medida que calentaba mejoraban. Pero tengo que admitir que me gustó más Warren Haynes, en la misma sala.
Igualmente, a los que os gusten los Allman Bros. no dudéis en ir a verlo.

Apocalipsis metal-céntrica

Para todos aquellos que pensabais que con el ciclo Maya o las profecías de Nostradamus estaba todo sentenciado, os dedico estas lineas reveladoras.
Toda vez que las fuerzas del bien y el mal se enfrentan, acabamos pagando los más débiles. La última de sus batallas se ha llevado consigo al maestro Jon Lord. Y este apocalipsis horrendo se trata de ver cuál de las dos fuerzas se lleva para sus filas a los mejores músicos de la Tierra. Primero los observan durante años para estudiar su virtuosismo. Luego se tiran años peleando para ver cuál se lo lleva. Finalmente nos dejan sin el artista.
Parece que en los últimos años la batalla ha arreciado y no paran de golpearnos: Dio, Hughie Thomasson, Steve Lee y ahora Jon Lord son sólo alguno de los ejemplos.
Todo tiene una finalidad que será el encuentro de bandas virtuosas final, en ella se enfrentarán los músicos de uno y otro lado y esto decidirá el fin de la historia.
Según algunos mr. LEMMY será el siguiente. Según otros será el árbitro. Según otros, los más, no se atreven a llevárselo.
Sea como fuere, la verdad es que se acerca el fin, el apocalipsis del metal, la última batalla que nuestros corazones rebeldes pueden ganar.
Así que levantemos nuestros cuernos y descoyuntemos nuestras cervicales en cada concierto porque puede ser al último al que asistamos.
Buen viaje Jon. Parte del metal ha muerto contigo. Hazles sacudirse con el sonido de tu Hammond!

Sweden Rock 2012

Vuelvo a la carga en formato móvil para dar mis impresiones del Festival.
De entrada, en tema logístico ha sido el año que mejor he llevado el cansancio y las inclemencias del tiempo.
De los grupos redescubrí a Amorphis, a Sepultura, y a Soundgarden.
De los grandes destacaron para mi Motorhead, Twisted Sister, Bad Co. y más en concreto Paul Rodgers. Lynyrd Skynyrd no pusieron toda la carne en el asador, me gustaron más Molly Hatchet el año pasado.
Y de los demás me gustaron: Fear Factory (sin Raimon Herrera), H.E.A.T. (con nuevo cantante dándolo todo), Dynazty, Imperial   State Electric (Hellacopters no se fueron del todo), Little Angels, Danko Jones, Night Ranger, Graveyard (tardan en calentar pero son como los amplis de válvulas que llevan), Black Spiders, Axe (contra viento y lluvia), Gotthard (empezando rodaje con nuevo bocalista), Girlschool (las rockeras van al infierno), Year of the Goat (tanta calidad musical que no prestas atención a las letras), King Diamond (no lo pongo tanto por la música como por el espectáculo), y Motley Crue (por la batería-montaña rusa y por Mikk Mars).
SRF, gracias por existir.